Un ataque al corazón se lo llevó hace 11 años. El 25 de junio de 1997, Jacques Ives Cousteau, nos dejó físicamente, pero moral y audiovisualmente permanece con nosotros.
Gracias a él muchos de nosotros aprendimos del mar y del mundo, llevó a nuestras casas el oceáno y la vida que hay en él, un lugar casi completamente desconocido en aquel momento.
Aún hoy, es pilar de conocimiento.
Aunque su popularidad vino de la divulgación que realizó sobre el mundo submarino, legó al mundo inventos que facilitaron y facilitan la investigación submarina.
Cousteau inventó, junto con Emile Gagnan, el sistema de buceo autónomo conocido como "Aqua-lung", que comprendía cilindros de aire comprimido y un regulador de gases. Este sistema permitió la popularización del buceo autónomo como deporte, debido a que otorgaba al buzo independencia con la superficie, al no necesitar un cable para el suministro de aire.
Y no solo eso, en 1950 creó junto a Jean Mollard un submarino, el SP350, para dos hombres que podía alcanzar los 350m de profundidad, exitoso experimento que fue repetido en 1965 con dos submarinos, capaces de llegar a los 500m de profundidad.
Popularizó las filmaciones submarinas, desarrolló nuevas técnicas de fotografía submarina junto con Luis Marden en los años 50, en 1963 junto con Jean de Wouters creó la cámara submarina Calypso-Phot, la cual sería más tarde entregada a la licencia de Nikon y llegó a ser conocida como Calypso-Nokkor y más tarde como Nikkonos.Incluso es responsable del diseño de barcos movidos por energía eólica, de los cuales el primero fué el Moulin a Vent.
Infinidad de adelantos técnicos que no tenían nada que envidiar al empuje que Cousteau le dió, a la ahora "común", defensa del planeta ya que fué de los primeros en avisarnos de los peligros a los que estábamos exponiendo a los oceános, a los bosques y en definitiva a toda la Tierra. Nos avisó del calentamiento global, del daño que los vertidos varios hacían a los mares y a la vida que en ellos nos iba descubriendo.
No sólo a todos aquellos que veíamos sus documentales, también a políticos y mandatarios de todo el mundo que pedían su consejo. Como muestra un botón:
"En octubre de 1960 una gran cantidad de desperdicios radioactivos iban a ser descargados en el mar por la Comunidad Europea de la Energía Atómica. Cousteau organizó una campaña publicitaria con la cual ganó amplio apoyo popular. El tren que llevaba los desperdicios fue detenido por mujeres y niños sentados en las líneas del tren y fue enviado de vuelta a su lugar de origen. En noviembre de ese mismo año, en Mónaco, una visita oficial del presidente francés Charles de Gaulle se convirtió en un debate sobre los sucesos de octubre de ese mismo año y sobre los experimentos nucleares en general. El embajador francés ya le había sugerido al Príncipe Raniero que evitara el tema, pero supuestamente el presidente le pidió a Cousteau, en una forma amigable, ser más comprensible con las investigaciones nucleares, a lo cual Cousteau supuestamente le contestó: "No señor, son sus investigaciones las que deben ser más comprensivas con nosotros"."
Más de 70 filmaciones, documentales y largometrajes como El Mundo del Silencio, El Mundo sin Sol o Viaje al fin del Mundo, que han ganado Palmas de Oro, Emy's y también algún Oscar. "El Mundo Submarino de Cousteau" se empezó a emitir en 1966 y hasta donde yo sé, en los 80 aún se veía por la tele. Incluso una serie de dibujos animados llamada "Las Aventuras del Capitán Cousteau".
Escribió junto a varios co-autores más de 50 libros, publicados en más de 12 idiomas, uno de ellos, "Los Humanos, Las Orquídeas y los Pulpos", espera en casa a que siga leyéndolo...(lo dejó en mi mesa un pelocho o un fraguel, en fin, un bicho), se conoce como el testamento ecológico de este gran hombre.
Y quién no recuerda el buque insignia por antonomasia, el Calypso, que recorrió los mares como el primer buque para la investigación oceanográfica. Era en un principio un viejo dragaminas del Ejército Britanico que ejercía de ferry y que fué alquilado a Cousteau, en 1940, por el módico precio de 1 franco al año por el multimillonario Leonel Guiness, y que fué comprado por Cousteau allá por los 50. Una historia poco conocida y que no deja de ser curiosa se relata en Para Nauticos.
Mucho por aprender aún de él, a quien debo, en parte, ser como soy y a quién admiro profundamente.
Un par de sitios de interés:
Cousteau Org Web
El Blog de Prometeo Murillo
Un par de vídeos con las canciones que Jean Michel Jarre creó y editó en un álbum con el nombre de "le Commandant": En attendant Cousteau (Waiting for Cousteau) (1990)
CALYPSO:
WAITING FOR COUSTEAU:
